Dentro de la especie animal hay uno que destaca por su capacidad de resistencia. No hablamos de las cucarachas, anímales sorprendentes, sino de otros más desconocidos: los tardígrados.
El tardígrado es también llamado "oso de agua" por su peculiar forma de desplazarse. Es un animal microscópico, aunque los que llegan a medir 0,5 mm. pueden verse a simple vista. Se extiende por todo el mundo y prefiere ambientes húmedos, como líquenes o musgos.
La característica más llamativa de este pequeño animal es su resistencia. Resiste temperaturas que pueden oscilar entre los -200°C y los 150°C. En caso de que le falte agua pueden entrar en un estado de hibernación y "volver a la vida" años después al ser rehidratados. Ha resistido a impactos de hasta 900 metros por segundo. Ha sobrevivido al espacio exterior al viajar en sondas espaciales. Incluso existe la posibilidad de que haya tardígrados vivos en la Luna al haberse estrellado contra la misma la sonda israelí Bereshit, que transportaba ejemplares de tardígrados.
Puedes ver al tardígrado en movimiento en este vídeo:
